lunes, 19 de diciembre de 2011

¿Cómo escoger el juguete adecuado?



Llegan la fiestas navideñas, días donde nos reencontramos con amigos y familiares, días de celebraciones, días donde nuestros niños disfrutan al máximo la llegada del Niño Jesús y San Nicolás. Y llega la hora de elegir ese juguete para nuestros hijos, sobrinos, amigos, ahijados, nietos; y se nos presenta ese gran dilema ¿Qué juguete será el adecuado?

Como profesional en Educación Especial, compartiré algunos conocimientos que espero puedan servirles a la hora de escoger ese juguete tan preciado por el niño y/o la niña.

Los juguetes son herramientas que posibilitan el desarrollo de las habilidades en los niños, pueden ser utilizados con fines educativos o recreativos dependiendo del uso que se tenga y de la intervención directa o indirecta de los padres o educadores. Son medios que cumplen un rol importante para el desarrollo integral del niño, por ello, los padres deben tomar en cuenta ciertos criterios antes de seleccionarlos. Los juguetes que escojamos para nuestros hijos deben ser seguros, apropiados a la edad y a las necesidades del niño.

Existen juguetes diseñados para estimular procesos cognitivos y habilidades como la atención, memoria, lenguaje (juegos de construcción, tarjetas de vocabulario, tarjetas de memoria entre otros) y otros que favorecerán elementos básicos como la afectividad y el proceso de socialización del niño como es el caso de los muñecos, cocinitas, vehículos, tiendas, médicos, juegos de mesa, juegos deportivos de equipo y todos aquellos que fomenten la participación de varias personas. Cada juguete puede proporcionar al niño numerosas posibilidades de desarrollo y aprendizajes dependiendo de su adecuado uso y de las habilidades que los padres o educadores pretendan incentivar.

A los padres muchas veces les cuesta elegir el juguete más apropiado para nuestros hijos pensando es cuestiones como la seguridad, las edades para las cuales está destinado y su valor educativo tanto para los niños como para las niñas. A continuación se darán algunos tips a la hora de escoger ese juguete para el niño y/o la niña:

El juguete debe ser deseado por el niño.
Debe ser seguro y consistente, que no lastime al niño.
Que con él puedan jugar niños y niñas indistintamente.
Que facilite poder jugar con los demás, la comunicación entre los participantes, las relaciones entre iguales.
Que favorezca la ayuda entre iguales y no la rivalidad (que no sea competitivo, que sea un juego en el que no gane nadie).
Que potencie las relaciones cooperativas, de ayuda, que se logre alcanzar entre todo un mismo objetivo o propósito en el juego (pasarlo bien).
Con el que pueda jugar cualquier niño y/o niña y no sólo quien tenga habilidades muy específicas (que no excluya a nadie).
Que sea divertido, motivador, que despierte el deseo de jugar.
Que desarrolle la imaginación y la creatividad, (que sea un juguete poco estructurado).




No es necesario un juguete caro, podemos aprovechar cualquier material sencillo…

Autor: Lic. Tania Rimer

martes, 12 de julio de 2011

Blog de la Semana




Agradezco enormemente a El Docente de Hoy: http://eldocentedehoy.org/, por haber nombrado este espacio como Blog de la Semana; estímulos así nos hacen a muchos colegas seguir adelante con nuestros proyectos. Gracias por la oportunidad y gracias a todos los lectores. Estoy por y para ustedes.

domingo, 19 de junio de 2011

Padres,...




Tener un bebé es una experiencia maravillosa, tanto para la mamá como para el papá.





El padre puede participar en esta emocionante jornada, ayudar a la mamá en su nuevo rol.Las madres de hoy tenemos muchas responsabilidades a cuesta, pero no cabe duda que el papel del padre dentro la familia, en los últimos años, ha cambiado; de aquel papá de actitud distante,de pocos abrazos y mimos hacia sus hijos, hemos pasado a la figura del padre amigo , que participa en la vida cotidiana, cambia pañales, les da de comer, se queda con los niños cuando mamá ha salido, los lleva al pediatra y al colegio.
Los padres de hoy, demuestran una gran tenacidad y muchas ganas de ayudar a sus hijos, de darles todo aquello necesario para un desarrollo adecuado, demostrando que son merecedores de la nueva condición.

Autor: Lic. Tania Rimer

martes, 11 de enero de 2011

Tener hijos seguidos, riesgo de autismo




Un nuevo sistema analiza su evolución y es capaz de diferenciar si el niño padece autismo o un desarrollo tardío del habla.

Un sistema que graba los balbuceos de los bebés y analiza su evolución puede diferenciar si el niño padece autismo o un desarrollo tardío del habla.

El método se ha probado con 282 niños en EEUU, los cuales llevaron en ropas especiales el dispositivo que grababa sus vocalizaciones durante todo el día. Los investigadores emplearon un total de 1.486 días (más de tres millones de sonidos grabados).

Para su estudio, emplearon un algoritmo (un software) que analizaba automáticamente 12 parámetros relacionados con la evolución del lenguaje, como puede ser la capacidad de los niños para pronunciar sílabas.

El método muestra que es posible monitorizar el desarrollo de los patrones de vocalización y, además, diferenciar aquellos que siguen una evolución normal de los que padecen trastornos como el autismo o el retraso en el habla.

El sistema, denominado LENA (acrónimo en inglés Análisis de Lenguaje Ambiental), distinguió a los niños con autismo con un 86% de precisión, por lo que los investigadores, encabezados por el doctor Kimbrough Oller, de la Universidad de Memphis, señalan que el análisis de los balbuceos de los bebés podría incorporarse a los síntomas que se usan para diagnosticar esta enfermedad.

Steven Warren, de la Universidad de Kansas, que también ha participado en el estudio, señala que algunos estudios habían sugerido que los niños con autismo presentan unas características de vocalización marcadamente distintas, pero, hasta ahora, no se había podido usar este conocimiento en aplicaciones clínicas debido a la falta de una tecnología de medición.

El autismo puede diagnosticarse en la actualidad a partir de los 18 meses de edad, aunque lo más normal es que no se identifique este trastorno hasta mucho después.

En Estados Unidos, se descubre como media a los 5,7 años de edad.

La nueva tecnología podría ayudar a los pediatras a identificar antes esta clase de enfermedades y ofrecer a los niños tratamientos más tempranos y más efectivos, de acuerdo con Warren.



Fuente: http://www.sumedico.com/